Las Naciones Unidas a través de la FAO (Food and Agriculture Organization) ha afirmado que en 2050 habrá más plásticos en el mar que peces.
Hoy en el blog de Essabó os vamos a hablar de un tema de suma importancia: los microplásticos.
Desde hace algunas décadas la preocupación por la cantidad de plásticos que hay en los mares ha alertado a las autoridades sanitarias, pero no ha sido hasta hace unos años que se ha urgido a la población a tomar conciencia sobre ello.
La misma ONU calcula que en nuestros mares hay 51.000 millones de partículas de microplásticos, 500 veces más que el número de estrellas en nuestra galaxia.
Asusta, ¿no?
Pero ¿Qué es exactamente un microplástico?
Se llama microplástico a los trozos de plástico de un tamaño inferior a los 5mm que formaban parte de otros plásticos mayores o han sido producidos con ese tamaño a propósito.
Como la naturaleza no tiene herramientas para descomponer de forma natural los plásticos, estos permanecen durante años, décadas e, incluso, siglos en nuestro medio ambiente.
Así, cada plato, vaso o palillo de los oídos de plástico que has usado continuará fragmentándose en la naturaleza y convirtiéndose en pequeños pedacitos durante siglos y pasando a formar parte de la sal común (tal y como corrobora la OCU en su informe sobre la sal de mesa), el pescado que comemos, las aguas de los mares y océanos…
Y no solo esto. Los plásticos son polímeros elaborados con muchos compuestos a los que se les añaden decenas de aditivos tóxicos, como los ftalatos, el Bisfenol-A (prohibido en los biberones y chupetes de los bebés por ser un probado disruptor endocrino que afecta a sus funciones hormonales), retardantes de llama o nonilfenoles, por citar algunos de los más habituales y tóxicos.
Con el paso del tiempo esos plásticos van degradándose y liberando todos esos tóxicos, contaminando nuestros mares y toda la cadena trófica: algas, corales, moluscos, peces…, causando alteraciones en todos ellos, incluido el plankton, la fuente de toda la vida marina.
Entre todos estos microplásticos queremos hacer hincapié en unos que están presente en tus cosméticos sin que seguramente lo sepas, y que va directamente a nuestros mares cada vez que te duchas, te lavas los dientes o la cara, ya que están presentes en las pastas de dientes, las cremas con efecto relleno y los exfoliantes.
Dejar de usar estos productos es vital para nuestro medio ambiente y para tu piel, porque los microplásticos de estos productos también llevan aditivos tóxicos y porque tras unos segundos de uso pasan a formar parte de una densa capa de microplásticos que cubren los fondos marinos.
En Essabó somos conscientes de la necesidad de actuar y usar productos saludables para tu piel, tu organismo y para el planeta, por eso hemos creado Essabó exfoliante, un jabón exfoliante 100% natural cuyas partículas abrasivas no sólo eliminarán las células muertas de tu piel con toda la suavidad del mundo, sino que al estar hechas de cáscara de almendra son 100% biodegradables e inocuas para el medio marino.
Desde Essabó creemos firmemente que nuestro paso por el mundo es totalmente compatible con el cuidado de la naturaleza sin renunciar a los avances que nos han permitido tener el grado de bienestar del que hoy disfrutamos.
Nuestro Essabó exfoliante, certificado como ecológico por la empresa suiza Bio Inspecta, una de las certificadoras más prestigiosas de Europa, está elaborado con aceites de primera presión en frío, con un proceso que mantiene intactas todas las propiedades de los aceites de coco y oliva, un jabón exfoliante ultra graso enriquecido con aloe vera para proteger la capa córnea de la piel y, al mismo tiempo, realizar una exfoliación que elimine las células muertas y revele la verdadera belleza de tu piel.
¡Porque para tener una piel bella no necesitas dañar el medio ambiente!