¿Qué propiedades cosméticas tiene el aceite de argán?

“Con más de 80 millones de años de antigüedad, este árbol ha sido capaz de sobrevivir y adaptarse al clima árido de Marruecos. Tiene una altura de 10 metros y una vida media de 200 años, aunque la producción de sus frutos puede tardar entre 30 y 50 años”.

El aceite de argán, también conocido como “Oro del desierto”, es un producto cosmético que se obtiene del fruto que da el árbol de Argán, o Argania Spinosa, cuyo origen en la naturaleza se concentra en la zona árida del Magreb.

La historia de este aceite está muy arraigada a las tierras de su país de origen y a los fenicios, quienes lo utilizaban como combustible para las lámparas de aceite por su gran luminosidad. Sin embargo, fue el pueblo bereber quien descubrió sus propiedades cosméticas y alimenticias. Y, desde ese momento, se empezó a incorporar en los hábitos de vida de sus gentes.

A lo largo de los siglos, ha sido muy apreciado por sus propiedades cosméticas y medicinales como protector de la piel ante los agentes externos. Aunque, hasta los años 90, después de que diversos estudios certificaran sus beneficios, no comenzó a comercializarse en los países europeos.

En la actualidad, la medicina tradicional marroquí lo incorpora como tratamiento para reumatismos, afecciones de la piel o la prevención de las estrías durante el embarazo.

Beneficios del aceite de argán

 El aceite de argán es rico en vitamina E, vitamina A, contiene una gran cantidad de antioxidantes y posee el 80% de ácidos grasos esenciales como el ácido linoleico, oleico, araquidónico y gamma linoleico. Por este motivo, es un aceite con grandes propiedades antioxidantes, hidratantes, nutritivas y regenerantes.

Si nos centramos en sus usos a lo largo del tiempo, este aceite ha sido comúnmente conocido por mantener la piel suave e hidratada. La gran cantidad y diversidad de ácidos grasos y vitamina E que contiene su fórmula, cuidan la piel de forma natural y se absorbe rápidamente sin ser pegajoso.

Asimismo, sus antioxidantes lo hacen un excelente aceite anti-envejecimiento, pues ayuda a prevenir los signos del envejecimiento prematuro como las arrugas de expresión y, la vitamina E, mantiene la elasticidad de la piel aportando gran luminosidad y suavidad al rostro.

Aunque su alta hidratación puede hacernos pensar lo contrario, el aceite de argán es ideal para tratar el acné. Al ser no comedogénico no obstruye los poros y reduce considerablemente el sebo de la piel.

Qué decir de su poder regenerante. Al tener fitoesteroles en su fórmula, este aceite es el gran aliado para reducir las antiestéticas marcas del acné y propiciará que los granos se cicatricen más rápido.

En cuanto a las uñas quebradizas, las manos secas y la piel áspera de los pies, gracias a sus propiedades nutritivas, la piel de las manos y de los pies quedarán más flexibles y las uñas mucho más fuertes.

Si además sufres de labios agrietados, también es idóneo para ti. Una simple gota sobre los labios los protegerá y cuidará eliminando las grietas y manteniéndolos suaves, flexibles y cuidados durante más tiempo.

Por último, si cuando llega el verano te gusta broncearte al sol, el aceite de argán…¡es tu salvación!. Gracias a su poder antiiflamatorio calmará la irritación cutánea producida por los efectos de los rayos del sol sobre tu piel

¿También es bueno para el pelo?

 ¡Claro! La vitamina E, sumada a los ácidos grasos esenciales, hacen que este aceite sea el mejor aliado para cuidar el cabello y mantenerlo saludable durante más tiempo. Entre los beneficios que aporta al pelo, hay que destaca su poder hidratante: ayuda a reducir la sequedad y proporciona un brillo sensacional al cabello.

Si tienes el pelo rizado y difícil de peinar, gracias al poder nutritivo del aceite de argán, no volverás a sufrir tirones mientras te peinas y el frizz o encrespado desaparecerá por completo. De esta manera, tu cabello estará más moldeable y sano tanto por dentro, como por fuera.

Si, por el contrario, tu problema es que tienes el cabello maltratado y con las puntas abiertas, pero cortarte el pelo no es una solución, añade unas gotitas de aceite de argán todos los días en las puntas del cabello. ¡Notarás los resultados!

Por último, si sufres de cuero cabelludo seco y con tendencia a la caspa o la irritación, masajea el cuero cabelludo con unas gotas de este aceite antes de acostarte. A la mañana siguiente, después de lavártelo, notarás un gran alivio.

En Jabones Beltrán somos conscientes de sus propiedades. Por ello, junto con el aceite de coco, el aceite de argán forma parte de la formulación de nuestro Champú Essabó y del exclusivo jabón Essabó Sáhara.

El aceite de argán, junto con el aceite de jojoba, la miel, la leche y el aloe vera, forma parte de los acondicionadores naturales de nuestro champú sólido. Y, la manteca de karité, junto con el aceite de Argán del jabón Sáhara, es ideal para nutrir, suavizar e hidratar las pieles más secas.

Si todavía no los conoces, no te los pierdas en nuestra “sección de productos”.

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