La etiqueta de un producto es uno de los instrumentos más valiosos para que los consumidores podamos saber qué hay en nuestros cosméticos.
Un jabón en pastilla para uso corporal es considerado un producto cosmético, y como tal, debe cumplir estrictas indicaciones en materia de fabricación, empaquetado, etiquetado y comercialización que aseguren la total seguridad del producto. Estas normas vienen marcadas de la Unión Europea según el Reglamento (CE) Nº 1223/2009 y es obligatorio para cualquier productor de jabones, inclusive para los fabricantes artesanales, y ya sean jabones ecológicos o convencionales.
Ofrecer un correcto etiquetado es de especial importancia pues refleja que la empresa fabricante opera bajo el conocimiento y cumplimiento de la Reglamentación Oficial, y sobre todo porque ofrece información importante y transparente al consumidor final.
¿Cómo saber si es correcta y completa la información del etiquetado de un jabón cosmético? ¿Y qué quieren decir los símbolos o palabras “extrañas” que aparecen en él? En este breve post os explicamos de manera clara y sencilla las claves.
La siguiente información debe ser fácilmente identificable, a la vista del consumidor en el mismo punto de venta y sin tener que abrir o desempaquetar el jabón:
- Función del cosmético e Indicaciones. Parece obvio en el caso de los jabones pero en la cosmética en general puede ser fácil la confusión. En nuestro caso debemos identificar que es un jabón, y como información adicional podemos explicar su uso, recomendaciones para tipos de piel…
- El nombre y contacto del responsable de la puesta en el mercado. No basta con la marca comercial, es necesario el nombre fiscal de la empresa y algún medio de contacto con ésta (teléfono, mail, web…). El objetivo es que si algún consumidor tiene alguna duda, comentario o queja sobre el producto, pueda contactar fácilmente con el responsable.
- El contenido neto en el momento del acondicionamiento, indicado en peso o en volumen y en el sistema internacional de unidades. Suele ir acompañado de la letra “e” que garantiza mayor veracidad y transparencia de la cantidad de producto envasada en el momento del acondicionado. Esto es porque los jabones pierden humedad con el tiempo, lo cual conlleva pérdida de volumen y peso. Si en la etiqueta pone “120g e” indica que en el momento que se fabricó el jabón pesaba como mínimo esta cantidad, a pesar de que es posible que con el paso de los meses, si se vuelve a pesar en la tienda o en casa, su peso sea ligeramente inferior.
- Se debe indicar una fecha de caducidad del producto, o bien utilizar el símbolo PAO, que es lo más habitual ya que realmente un jabón no caduca. Representa la “fecha de consumo una vez abierto”, y equivale al número de meses durante los que el producto permanece en buenas condiciones tras su apertura inicial.
- El número de lote de fabricación es algo muy importante pues gracias a ello podemos evaluar la trazabilidad de cualquier producto. Es un número asignado a la producción de este producto en concreto y gracias a él, a nivel interno en la empresa, se puede saber exactamente con qué ingredientes se ha fabricado el jabón, por quién e incluso dónde se ha fabricado y con qué medios. Gracias a este número se accede rápidamente a los boletines de análisis, fichas técnicas de ingredientes y a cualquier procedimiento interno que pudiera ser necesario. Este control interno permite identificar cualquier detalle relacionado con los productos comercializados y es esencial en caso de inspecciones, reclamaciones y/o incidencias. También el código de barras es útil para el control en su etapa comercial.
- Por último y más importante, la lista de ingredientes cualitativa en nomenclatura INCI y siempre de mayor a menor concentración. La abreviatura “INCI” significa (International Nomenclature Cosmetic Ingredient, o lo que es lo mismo, Nomenclatura Internacional de Ingredientes de Cosméticos). Se trata de una nomenclatura en latín unificada a nivel europeo y prácticamente mundial. Lo bueno es que con este lenguaje podemos leer la composición de prácticamente cualquier cosmético, venga de donde venga. Lo malo, que es un “idioma” bastante complejo y no es fácil de entender para quien no es técnico o experto en el tema. Por suerte con internet y un poco de tiempo se puede ir “traduciendo” todo y realmente es posible saber qué llevan los cosméticos. No obstante, en próximos posts os daremos más información sobre cómo leer el INCI de jabones, con la explicación de los términos más habituales.
- La etiqueta también puede contener otros símbolos relacionados con certificaciones de la empresa (Artesanía, Reciclaje, ISO,…) y/o del producto (Ecológico, Natural, Vegano,…).
¿Y qué pasa con la cosmética o jabones artesanos al corte o a granel? Lo mismo. Toda esta información debe estar visible (con un cartel por ejemplo) en el mismo punto de venta, junto al producto. Si realizas la compra del producto, el responsable de la venta debería entregar copia de esta información por escrito, bien sea en el ticket, en una etiqueta pegada en el producto o en un folleto.
Como consumidores y usuarios tenemos derecho a tener a mano (y sin necesidad o molestia de tener que pedirlo) toda esta información -especialmente importante el peso y el INCI- para poder conocer, comparar y elegir de manera consciente y responsable nuestra compra, más allá del precio.